Por el arquitecto CLAUDIO PEZZI
PUESTA EN MARCHA DE UNA OBRA
No
haremos referencia al proyecto y todos sus componentes porque damos por sentado
que esto existe desde 2007 para el caso de Libertadores de América.
Aclaramos
que no siempre el profesional proyectista coincide con el que se hará cargo de
la Dirección de Obra. Pueden ser contratos separados, como el caso específico del
estadio.
De
cualquier manera para que el proyecto tenga completa y eficaz validez, todos
los contratos que liguen a uno o varios profesionales con el denominado Comitente
(en este caso el Club Atlético Independiente) deben ser visados por el colegio
profesional que reglamente el ejercicio de cada profesión con incumbencia en una
obra de la envergadura del Libertadores de América (para este caso puede ser de
Arquitectos o Ingenieros, según sea la profesión del Director de Obra y/o
Calculista estructural contratado).
Resaltamos puntualmente esto, pues el
Director de Obra será a partir del inicio de los trabajos, el máximo
responsable por la calidad de ejecución, por el cumplimiento de plazos
previstos, por los vicios de obra (ocultos y/o aparentes) que pudiesen
manifestarse una vez cumplimentados los trabajos y por la facultad de poner en
marcha los mecanismos de garantía (Fondo de Garantía) que se establezcan en los
contratos, que quien ejecutó los trabajos debe aceptar sin que sea motivo de
discusión alguna.
Sólo
con la finalización de esta etapa, más la presentación de los planos, cálculos
y especificaciones técnicas adicionales podrá ser posible obtener la aprobación
de las autoridades municipales de la localidad en la que estará implantada la
obra. Se obtiene un número de expediente de obra y un número de permiso de
ocupación de la vía pública por el tiempo que dure el contrato.
El
inicio real de una obra
Superadas
las etapas arriba descriptas, una obra no se inicia formalmente hasta que:
-
Se firme el acta de replanteo que acredite la fecha de inicio de
los trabajos
-
El Representante Técnico de laEmpresa Constructora firme el Libro
de Ordenes y Servicios que el Director de Obra pone a disposición debidamente
foliado. Para explicarlo en pocas palabras, es el único documento válido para
el caso de tener que dirimir diferencias entre el Comitente y el Contratista.
Se debe hacer por triplicado. Y se asientan día a día cada acontecimiento que
suceda (recepción de materiales, órdenes varias del Director de Obra al Contratista
y la respuesta dada por éste a esos requerimientos, acontecimientos
extraordinarios, incidentes varios, etc.). El original debe permanecer en obra,
una copia en poder del Director de Obra y otra en poder del Contratista.
-
Sean inspeccionadas y aprobadas por el Director de Obra todas
las normas de seguridad que especificadas en la legislación vigente
-
Sea colocado, con frente a la vía pública y al alcance visual de
cualquier persona, un cartel donde, reglamentariamente, al menos se
especificará:
a)
Destino de la obra
b)
Nombre, Apellido, Profesión, Matrícula del Colegio Profesional y
Matrícula Municipal del Director de Obra
c)
Idem punto b en caso que otro profesional haya desarrollado y
sea responsable por los cálculos estructurales
d)
Número de Expediente de Obra aprobado por el Organismo Municipal
e)
Numero de Permiso de Ocupación de Vía Pública
f)
Razón Social, Domicilio Legal y número de CUIT de la Empresa Constructora
que llevará adelante las tareas
g)
Nombre, Apellido, Profesión y número de Matrícula del Representante
Técnico de la Empresa Constructora
Cualquier
otra tarea que se desarrolle previamente como ser construcción del cerco de
obra reglamentario, limpieza y preparación de la zona de trabajo, mediciones y
marcaciones especiales, etc. NO forman parte de la obra y se los denomina Tareas
Preliminares. Deben estar supervisadas por el Director de Obra y no es
obligación que sean ejecutadas por la empresa constructora contratada, salvo
que taxativamente figure en los contratos.
Ponemos
como ejemplo la remoción de la pantalla de led realizada días atrás. Trabajo
que ha sido ejecutado por la empresa proveedora de la misma.
Todas
estas consideraciones desarrolladas parecieran ser menores o de formalismos
estériles. También se pueden tomar como meras cuestiones semánticas. Pero puedo
asegurar que el fiel cumplimiento de ellas es lo que garantiza en definitiva el
buen resultado. Y sólo así se evitará repetir experiencias anteriores que a
todos los socios del CAI todavía nos duelen.
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