Notas de Clarín hoy 8-1-21
Por Nahuel Lanzillotta
Punto final: Lucas Pusineri dejó de ser el técnico de un Independiente en autodestrucción
"Independiente es autodestructivo", fue la cruda y concreta descripción que Jorge Burruchaga hizo públicamente -entre otras duras declaraciones cargadas de triste realidad- hace un par de días cuando renunció oficialmente a un cargo de mánager en el que jamás se sintió cómodo y con poder de decisión. Y los pedazos de este gigante rojo se siguen desprendiendo como en un glaciar. Ahora el que se cayó al fondo de la caldera del Diablo fue Lucas Pusineri, a quien la dirigencia decidió finalmente no renovarle el contrato para este año."Pusineri va a seguir siendo el técnico de Independiente", había asegurado el vicepresidente, Pablo Moyano, el 12 de diciembre cuando los rumores de disconformidad en la Comisión Directiva eran cada vez más sonoros. El secretario general, Héctor Maldonado, declaró en la misma dirección esa semana. Los dichos trajeron alivio al DT, que hasta llegó a manifestar en una conferencia de prensa su alegría por continuar en 2021.La eliminación de la Copa Sudamericana con goleada sufrida ante Lanús fue un golpazo. Pero así y todo, Hugo Moyano y su mesa chica le dijeron personalmente a Pusi el 23 de diciembre que su renovación estaba asegurada. Pero los papeles nunca se firmaron y todo se fue dilatando. En el medio, Independiente cayó de local ante Arsenal y se despidió de sus chances en la Copa Diego Maradona. Y la dirigencia reculó.-En esa maniobra, empezaron a sumar obstáculos en el camino que presagiaban el desenlace: rebajas salariales, modificaciones en el grupo de trabajo y finalmente la prioridad de la elección de un mánager antes de definir el futuro del técnico (¿Nicolás Burdisso?). El desgaste de los últimos días le fue dando cuerpo a la noticia que se oficializó este jueves, la fecha límite que había puesto el DT, tras una reunión en el sindicato de Camioneros. La postura de Pusineri tenía un argumento lógico a corto plazo ya que Independiente enfrenta a River este sábado por la última fecha. Ya había dirigido con el vínculo vencido y no quería volver a hacerlo. Pretendía una definición urgente. Pues bien, ya no estará sentado en el banco, muy a su pesar.Pusineri había dejado en claro que pretendía continuar pero que necesitaba contar con la certeza de un apoyo de la CD que se fue diluyendo y ahora llegó a un anunciado final. La desprolija y manoseada salida de Pusineri, un tipo querido en el club en el que supo ser protagonista del título en 2002 (el último a nivel local del Rojo) y que se las arregló con un plantel corto para dos competencias, es una nueva mancha en el mantel de la mesa dirigencial moyanista, que acumula varios desaciertos ya en esta segunda gestión que finalizará en diciembre.- El 2020 fue fatídico para todos los clubes del fútbol argentino, pero para Independiente fue todo un padecimiento interminable. De hecho, los coletazos continúan. La crisis económica estalló en plena cuarentena. Las intimaciones de una decena de futbolistas por atrasos salariales destaparon una olla a presión que ya no resistía. A partir de allí todo fue caos. El desfile por la puerta de salida de referentes y nombres de peso dejó al equipo desarmado. Leandro Fernández, Gastón Silva, Martín Campaña, Cecilio Domínguez, Juan Sánchez Miño, Fernando Gaibor decidieron irse. Muchos de ellos siguen en conflicto legal con el club. De Pusineri, la directiva elogió el trabajo que realizó con la promoción de juveniles a Primera y la reconstrucción de un vestuario detonado. Y hace dos semanas Moyano mismo le había dicho que el proyecto seguía adelante. Pero el final fue otro. En el medio, y como si todo esto fuera poco, el oficialismo volvió a partirse y esta vez pareciera ser de modo definitivo. La probación de un balance que arrojó un pasivo de 2.807.225.559 de pesos a junio de 2020 (sin incluir los juicios en dólares que tiene en FIFA que podrían aumentar la cifra en caso de perderlos o reducirla si sale favorecido) fue un punto de inflexión en una relación ya desgastada entre el grupo camionero y los demás. Los integrantes del "grupo champagne", la pata no camionera de la Comisión Directiva, demostraron su descontento con su ausencia en la Asamblea en la que se dio luz verde al balance con los votos oficialistas (la oposición lo hizo en contra). Y el secretario deportivo, Jorge Damiani, marcó un camino que podrían seguir varios al pedirse licencia. Damiani, que mantuvo varios cruces mediáticos con Pablo Moyano el año pasado, argumentó motivos personales oficialmente pero se aleja por diferencias en el manejo del club y evalúa presentar la renuncia próximamente. Él podría no ser el único. De hecho, en diciembre ya había renunciado el vocal Walter Cilia. Otros analizan imitarlos: Carlos Montaña (vice segundo), Adrián Espósito (secretario administrativo), Gustavo Lema (secretario de Promoción y Comercialización de Imagen Institucional), Daniel Seoane (secretario de Convivencia y Seguridad), entro otros. Con dirigentes cuestionados, con un equipo deshilachado, con ídolos descartados, sin técnico y sin mánager, Independiente prolonga su presente autodestructivo.
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