Clarín informa que ayer se concretó la desvinculación de Sanchez Miño de Independiente, tras un pésimo comportamiento profesional del ahora ex jugador del club, que de buenas a primeras decidió irse burlándose del contrato que tenía firmado y obligando al club, mediante su simple incumplimiento liso y llano (no entrenar, eventualmente no jugar, etc) a rescindirlo en una suma ínfima.-
Es curioso que alguna corriente nueva que pretende abrirse paso en el club felicite este accionar y lo califique de gran profesional, excepto que para este grupo opositor, el profesionalismo de un jugador se mida en relación directa con su grado de enfrentamiento con la dirigencia, quedando en un segundo plano los intereses del club.-
Es curioso como esta comision directiva no lo sancionó si tenía la razón. El profesionalismo se mide en la forma que se cumple con lo comprometido, cosa que esta curiosa comision directiva nunca cumplió. Con y sin pandemia. Refugiándose en la prepotencia, de forma tal que se fueron todos los integrantes capacitados de la Comisión Directiva, con Hugo Moyano alejado de la conducción, dejando sin representación al club ante la Afa y la Conmebol, con Pablo Moyano peleandose con todos y tomando malas decisiones y con Maldonado haciendo los peores negocios (para Independiente) en las contrataciones.
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