lunes, 27 de julio de 2015

Ricardo Giusti y Claudio Marangoni recuerdan la Libertadores 1984

En La Visera, por AM 1490 RADIO GAMA, se recordó la copa Libertadores de 1984, en una nota espectacular de 30 minutos dialogando con dos de los protagonistas más destacados de ese equipo, Ricardo Omar Giusti y Claudio Oscar Marangoni: 

Giusti: "Uno siente mucha alegría pensando en esa copa que ganamos, pero a su vez hay una tristeza oculta, que es la realidad: 31 años es casi una vida.- Como decías que peinamos canas, es porque han pasado 31 años nada menos.- Independiente fue el equipo a través del cual llegué a la selección.- En 1984 formamos un equipazo, el partido contra Brasil contra el gremio fue espectacular.- Cuando terminó el partido el público de Gremio nos despidió con aplausos.- jugar bien en un país tan difícil y cancha tan difícil y que nos reconozcan fue maravilloso.- La revancha en Avellaneda no jugamos tan bien, pero nos aseguramos el resultado.- 
Claudio Marangoni:  Giusti me daba una, dos y tres manos por derecha, siempre con su generosidad, siendo la rueda de auxilio de todos, y también creaba, con Clausen , con Calderón, por cualquier lado desequilibraba.
Giusti: Que fenómeno Claudio, cada vez que encaraba dejaba tipos en el camino y llegaba al gol.- Es difícil hablar de compañeros, todos tenemos palabras elogiosas.- Había un gran equipo, cada uno sabía su rol, yo corría y estaba encantado de hacerlo porque tenía a este al lado, a Bochini, a Burruchaga, a Trossero y Villaverde atrás... estaba tan bien confeccionado el equipo por el Pato, que lo armó de esa manera, y no solo lo armó sino que protagonizó un fútbol, plenamente identificado por el hincha.-
Marangoni: Había 11 caciques y ninguno envidiava al otro, todos eramos felices si al compañero le iba bien, era un placer ver jugar al equipo.- Cuando yo perdía una pelota, decia: bueno, el que me pasó, ahora tiene que pasar a Trossero y a Villaverde... Era como una selección, cada uno tenía su rol muy claro.- Gustaba entrenar, competir y ser protagonista. Ibamos a cualquier cancha sabiendo que ibamos a ganar porque creíamos en lo que hacíamos.-
Giusti: El partido que más tengo grabado, fue con el Gremio de visitante, fue espectacular.- Eramos felices viéndonos entre nosotros, nos divertíamos de un modo tal que llevabamos el fútbol a todos lados.- Me dejó grabado ese partido.- Que los tipos nos despidan en aplausos, fue maravilloso.- Hubo muchos momentos, en Paraguay, los asados del Pato, fue una Copa que a la distancia uno tiene muchísimas cosas grabadas.-
Marangoni:  Liverpool había sido campeón del torneo inglés durante 10 años y era como un Barcelona, teníamos la incógnita de que podía pasar, pero después del partido que dice Ricardo, el equipo se recibió con todos los honores.- Contra Liverpool fue un paso más.- No era una cosa menor, habían repartido camisetas del Liverpool, pero nosotros los superamos con inteligencia, con táctica, corriendo.... Fue el broche de una campaña de campeón argentino, campeón Libertadores y Campeón Internacional.- Se cerró un broche de futbolistas, de técnico y de una administración dirigencial que era maravillosa (presidía Pedro Iso).- Estaban Nilo Bonell, el profesor Kenny, Saturnino Las Heras, Fernández Schnorr...
Giusti: Anécdotas del Pato hay muchísimas, pero quiero hablar de algo que en todos los planteles es fundamental: el técnico, en todos los tiempos, debe formar un grupo, y a partir de eso empiezan a desarrollar tácticas, estrategias, como defendemos, como atacamos.- Lo primero es crear un grupo.- El pato tenía esa cosa, era tan ameno en las prácticas, en los viajes, eran maravillosos, desde el último suplente y quienes ni siquiera eran suplentes.- Era un verdadero grupo.- Quiero rescatar del pato eso: creó un grupo espectacular, incluso con gente grande, con nombre dentro del futbol internacional.- Eso fue lo más importante del Pato.-
Marangoni: El Pato era guapo, entonces sacaba pecho donde iba, porque como jugador fue guapo.- Y era ganador, transmitía al equipo esa filosofía.- Era solidario, con quien tenía un problema.-. Y no te hinchaba las pelotas, no te martirizaba con normas, con reglas, te dejaba expresar.- jamás me dijo qudate, no arriesgués, o a Clausen y Enrique quedensé... vayan 120 veces.- Te daba una confianza que no podías no responderle.- Creía primero en el hombre y después en el sistema.- Fue la ecuación perfecta para lograr tantos triunfos.- El resultado responde todo.- No me quiero olvidar de Ramón Adorno y de Cirricione, que entrenaba a los arqueros.- Ramón era un ladero permanente del Pato, para los cambios, para cuando había un jugador enojado...
Giusti: Goyén había jugado al básquet, por eso salía tan bien.- Para el Bocha hay pocas palabras.- Bochini ha sido un espectacular jugador, increible.- Nos ha tocado jugar contra de él y decía este pelado es increible, la pelota te la dejaba a 15 cm y cuando movías una pierna te dejaba mirando para el arco contrario.... 
Marangoni: Estoy enojado con el Bocha, porque le dí dos millones de pelotas y él no me habrá dado ninguna... nunca estuvo apurado, él me decía "para que te la voy a devolver si vos jugás atrás mío".- El encaraba para adelante y pasaba, y no lo esperaba nadie, ni siquiera el que picaba creía que le iba a llegar la pelota.- Como lo hacía, es un misterio.- A Boca lo tenía de hijo.- Yo le dí el pase a Percudani en la final intercontinental.-
Giusti: El gol que le hice a Rácing cuando lo mandé a la B es el que más recuerdo, me acuerdo muy bien porque el pase me lo dió Bochini, yo me había hecho un pique de 40 metros y la crucé bien, fue un lindo gol, y la gente cantaba "Bo-Bochini".- Cuando intervenía él no había otra que alabarlo.-
Marangoni: Me acuerdo del primero gol que hice, contra Central en mi segunda fecha. Yo llegué de Huracán con un cagazo bárbaro. Encima el Bocha esos partidos no los jugó, el segundo para mi era una prueba porque tenía que demostrar estar apto.-. Ganamos e hice el gol y fue un envión tremendo.-
Giusti: Villaverde atrás era un fenómeno, se arreglaba sólo porque Trossero a veces subía, y siempre podía.-
Marangoni: Barberon aportaba mucho, como ese pique inolvidable al ganarle a Olimpia sobre la hora.- Cada quien con características diferentes, eramos importantísimos.- Me acuerdo contra Boca que ibamos 5-2 y me encuentro con Gatti es un mano a mano, le amago pero se quedaba parado, al final la agarra y me dice: "Maranga, ¿no te das cuenta que soy Dios?"
El audio aqui.-




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