A la promesa que tiene el Rojo se la
quieren llevar para Portugal. Un grupo ofrecería seis millones por el
juvenil y así llevarlo al Benfica. Desde la dirigencia de Independiente
el número no seduce mucho.
Estaba cantado que las ofertas por Ezequiel Barco
no iban a tardar en llegar. El Turri es un diamante en bruto que aún no
se ha podido terminar de moldear y por distintos motivos no encontró,
por ahora, un equipo que le termine de aportar la madurez necesaria para
recibirse de jugador. La llegada de Ariel Holan apunta a sostenerlo y darle el mayor rodaje posible pero pese a todo ya se lo quieren llevar.
Si
bien en lo poco que vio de acción en el Sudamericano Sub 20 no tuvo un
gran andar sus habilidades no escaparon al ojo de los cazatalentos y por
eso en las últimas horas trascendió el interés de un grupo inversor
portugués para quedarse con el pase de Barco. Para tal motivo llegarían con seis millones de dólares y la idea de darle continuidad en el Benfica del fútbol luso.
La
suma de dinero a simple vista resulta atractiva ya que el chico jugó
poco. Pero todo el mundo sabe que si se lo lleva de a poco es un hecho
que pronto podrá ser un futbolista de renombre e incluso cargarse la
responsabilidad de conducción del equipo. Por tal motivo la dirigencia
desestimaría la millonaria oferta a la espera de que Barco, quien llegó
al club recomendado por Diego Griffa en 2015, tenga un buen torneo y
Mundial Sub 20 para que pueda aumentar su cotización.
Subido a primera por Gabriel Milito y ponderado por todos en Independiente
la joya esperará tranquilo ya que tiene mucho por aportarle al Rojo.
Eso sí, es posible que la oferta pueda ser mejorada y entonces habrá que
ver si Moyano y su comisión logran darle nuevamente la espalda.
Por Luis Stocik para Diario Popular
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